No tengas prisas, saborea cada momento que llega, pero hazlo en el momento que tenga que llegar. Mientras tanto no gastes tu tiempo en pensar cuando, como y donde. al revés, aprovéchalo en hacer cosas diferentes que distraigan tus pensamientos, porque sino te meterás en un espiral que no te hará ningún bien ni a ti, ni a los que realmente te quieren. A veces, buscar sentido a la vida, a lo que le pasa a cada uno, lo único que hace es hacerte infeliz, porque no existe una respuesta universal, ni existirá jamas. Por eso cuando comprendas que el hecho de dejarte llevar por las cosas sin pensar en el pasado ni en el futuro es el verdadero sentido de la vida, seras realmente feliz. Valora a los que te dedican su tiempo, no a los que no son capaces de darte ni un solo minuto, valora el presente, la gente que esta contigo día a día, valora tus minutos, valora tus momentos, porque probablemente no volverán. Valora a quien de verdad tenga valor y aprecia lo que tienes y lo que realmente merezca la pena antes de que se convierta en lo que tuviste.

A Medias Naranjas!

No me sirve gris, me gusta blanco o negro. Doy tanto como espero: todo o nada. De mi estatura aprendí que es lo único pequeño con lo cuál debo conformarme. No nací "Común y corriente" y no sirvo para ser sencilla. Pediré tanto como pueda dar, pero no exigiré nada. Si algo no me sirve, lo boto, si un amor no me llena lo derramo y si a un novio le gusta otra, lo regalo. 

Seguiré enamorándome de todos y a la vez de ninguno, así lo encuentre o se me pasen los años. Me quedo con mi lógica cincuentera del amor, porque es de eso que soy testigo. No me sirven las relaciones casuales ni la palabra de hombres a los que en lugar de hombría, sólo les quedan hormonas. 

No importa a cuántos tenga que enseñarle el verdadero significado de corresponder. No esperaré que me quieran porque sí, pero no aceptaré las dudas ni los peros. Me haré querer como soy, sin esfuerzos de ningún tipo. Al final, no importa que él ahora sea un galán de película como el que yo siempre quise, que el otro no dude tan fácil de lo mucho que ella le gusta y que el último no cambie una Margarita por un ramo de rosas. No importa, porque lo más importante, es no haberme conformado con sus escalas de grises, haber tenido los cucos puestos para sostener un NO, sencillamente porque me merezco lo mejor.

Me gusta que me endulcen el oído, quiero que me quieras de una forma insoportable, de una manera loca. Que me beses lento, que me creas incomparable, que me cuentes lo que quieras, que le coquetees a todas en mi cara, para que sepan que así les digas cosas bonitas, sólo conmigo se te para. Que robes por mi, vivas por ti y que mates por los dos. 

"Uno acepta el amor que cree merecer". 

-"The perks of Being a wallflower", del director Stephen Chbosky.